1- Cableado y Sección de los conductores: Respecto al cableado de la instalación, es muy importante minimizar todo lo posible la longitud de los cables a utilizar, procurando que las distancias entre paneles, regulador, baterías y el inversor de corriente sean las menores posibles.
La sección de los cables se debe elegir de forma que las máximas caídas de tensión en ellos, comparadas con la tensión a la que estén trabajando, estén por debajo del 1 % para el sistema fotovoltaico y entre el 3 % y 5 % para la instalación de la vivienda
2- Estructuras soporte: El anclaje y la propia estructura deberán ser suficientes para garantizar su comportamiento estable frente a los vientos de máxima intensidad que cabe esperar en la zona, y como mínimo resistirán velocidades de 150 km/h.
Normalmente, el propio distribuidor de los paneles suministra la estructura adecuada para los mismos, según el número de ellos ó bien facilita las dimensiones de los perfiles necesarios para su construcción.
3- Elementos Auxiliares: Los dispositivos tales como interruptores termomagnéticos, medidores, alarmas, descargadores de sobretensión, etc. se dimensionarán teniendo en cuenta la intensidad máxima de corriente que han de soportar, eligiendo el modelo de acuerdo a las especificaciones técnicas del fabricante. En todo caso, conviene tomarse un pequeño margen de seguridad, de manera de no hacer trabajar los equipos al límite ó simplemente tener margen para futuras ampliaciones.
Todos los elementos auxiliares siempre es conveniente agruparlos en un tablero con sus correspondientes identificaciones, tanto de los elementos como de los circuitos, ya que normalmente la gente que opera y mantiene la instalación no dispone de planos de detalle de la misma.
En instalaciones de gran potencia, es conveniente separar los circuitos de corriente contínua de los de corriente alterna, los de generación y los de consumo.
4- Respecto a la elección del equipamiento para una instalación fotovoltaica (ó para cualquier otra), es fundamental contar con equipos que cumplan determinados requisitos de calidad, y si es posible, que cumplan las normas internacionales ó nacionales que rigen el producto ó eventualmente sean de calidad probada.
Los paneles fotovoltaicos, fundamentalmente, son los pilares de una instalación fotovoltaica, de ellos depende cuánta energía se acumulará en baterías ó entregarán a nuestro sistema. Por ello es clave que cumplan con la norma internacional que los rige (IEC 61215). Existen otras que pueden ser la UL ó la misma CE (aptos para la Unión Europea).
También el equipamiento de maniobra y protección contra sobrecargas y cortocircuitos, deberá cumplir con la Norma IEC 60947 y los dispositivos de protección contra sobrecargas atmosféricas con la Norma IEC 61643.